En la última década, las redes sociales se han convertido en plataformas rentables para influencers, creadores de contenido y streamers. Muchos obtienen ingresos por patrocinios, colaboraciones con marcas, donaciones de seguidores o por contenido monetizado en plataformas como YouTube, TikTok, Instagram o Twitch.
Pero, ¿esas ganancias pagan impuestos? La respuesta corta es sí. En El Salvador, todo ingreso económico está sujeto a tributación, y los ingresos digitales no son la excepción.
¿Qué dice el Ministerio de Hacienda?
Según el Código Tributario salvadoreño, cualquier persona que reciba ingresos recurrentes —ya sea por salario, servicios profesionales o actividades comerciales— debe inscribirse como contribuyente y declarar sus ganancias.
En declaraciones previas, voceros de Hacienda han advertido que ya monitorean transacciones electrónicas y pagos de plataformas como Google AdSense, PayPal o remesas de empresas extranjeras como Meta.
¿Cómo funciona la tributación?
Todo influencer que:
- Obtenga ingresos por contenido digital (patrocinios, monetización, productos promocionados)
- Tenga ingresos superiores a $4,064.00 anuales
- O perciba pagos desde cuentas bancarias locales o del exterior
debe inscribirse ante Hacienda como persona natural o empresa, emitir facturas si es requerido y presentar sus declaraciones de renta anualmente.
Si el influencer tiene ingresos esporádicos y no supera ese umbral anual, podría quedar exento, pero debe tener documentación que respalde esos ingresos como “ocasionales”.
Plataformas que ya están bajo observación
Aunque muchas transacciones ocurren de forma digital, las autoridades salvadoreñas han iniciado procesos de modernización fiscal para vigilar ingresos desde plataformas como:
- YouTube (Google AdSense)
- Facebook e Instagram (Meta monetización)
- Twitch (suscripciones y donaciones)
- TikTok (regalos virtuales y fondos de creadores)
- PayPal y Stripe (procesadores de pago)
De hecho, algunos influencers han sido contactados por Hacienda para solicitarles documentación de ingresos, pagos de IVA no declarado o inconsistencias entre su estilo de vida y su actividad formal.
¿Y si no declaran?
No declarar ingresos por redes sociales puede conllevar:
- Multas por omisión de renta o IVA
- Bloqueo de cuentas bancarias
- Requerimientos legales por evasión fiscal
- Inclusión en listas de seguimiento por parte de la Unidad de Investigación Financiera (UIF)
Además, cualquier persona que sea contratada por marcas o instituciones debe emitir factura o recibo de prestación de servicios si el pago lo exige.
¿Se puede formalizar siendo influencer?
Sí. Varios creadores en El Salvador ya se han registrado como profesionales o empresas, lo que les permite:
- Deducir gastos (internet, equipos, producción)
- Tener acceso a créditos o financiamiento
- Cobrar de forma legal a marcas nacionales o internacionales
- Participar en licitaciones o patrocinios con empresas grandes
Además, les ayuda a evitar problemas legales y a mejorar su reputación profesional.
En El Salvador, ser influencer también conlleva responsabilidades fiscales. Si obtenés ingresos por redes sociales, lo más recomendable es informarte, regularizar tu situación ante Hacienda y mantener en orden tus finanzas digitales. La era digital ha transformado la economía, pero también exige nuevas formas de cumplir con la ley.